Entra por la puerta, y ni la vemos, se instala en casa y creemos no sentirla, aparece cuando uno menos se lo espera, esta por ahí dando vueltas, claro, casi forma parte de la casa, a veces uno se pregunta, ¿La hemos invitado? ¿Como así apareció por aquí? ¿Por que está aquí, sin invitación alguna? Es difícil deshacerse de ella, jode, perturba, pero es cómoda, es parte de nuestras vidas, pero es peligrosa, muy peligrosa, hay que ser muy creativos para que no nos inunde por completo, día a día es un gran chamba no cruzarse con ella, hay que cambiar las cerraduras de casa, de forma constante, porque es alarmante su presencia, pero todos nos cruzamos con ella, es cierto, cuantas veces nos repetimos, hay que luchar contra ella, no la dejemos entrar en nuestras vidas, que no se apodere de nosotros, pero por ahí anda amenazante, constante, quitándonos espacio, jodiéndonos la vida, mmm suelo ser muy creativa, si, pero a a veces uno tiende a repetir esquemas, situaciones, momentos, y es ahí que la peligrosa entra, y se va instalando cuando uno se descuida, así que a luchar a diario y constantemente, contra esa amenaza alarmante, la jodida "rutina".
Ceana
No hay comentarios.:
Publicar un comentario